La ruta pasa por un paisaje espectacular de montaña alta al Mulhacén, con sus 3.479 metros la cumbre más alta de la Península Ibérica. Esta variante de la subida del Mulhacén empieza desde la Hoya del Portillo (2.145 m) desde la cual caminamos por una carretera sin asfaltar - cerrada para turismos - hasta el Alto del Chorrillo (2.727 m). A partir de allí continuamos la subida por una senda más estrecha y más empinada, primero al Mulhacén II (3.362 m.) y luego al Mulhacén. Técnicamente la subida no resulta complicada, sobre todo si la realizamos en verano, sin nieve. Sin embargo - por la distancia de la ruta, el desnivel y el aire enrarecido a este altitud – sí hemos calificado la dificultad de esta ruta como alta.
- Desde la Hoya del Portillo (1) pasamos la barrera y luego seguimos durante más de 8 kilómetros la pista, que lleva al Alto del Chorrillo. En la vuelta hacemos un atajo entre el punto (8) y el punto (2), pero en la ida seguimos sencillamente esta pista.
- El Alto del Chorrillo (3) es un pico de unos 2.700 metros que se encuentra a la izquierda de la pista y es donde termina el autobús desde Capileira, que es una opción para acortar la ruta drásticamente. Para este autobús es necesario reservar asientos con antelación.
- En el Alto del Chorrillo podemos ver una cumbre enfrente a la izquierda. Detrás de ella - no visibles – se encuentran el Mulhacén II y el Mulhacén. Aquí se parte el camino. Nosotros cogemos la senda estrecha más a la derecha.
- Seguimos esta senda durante un buen tiempo. Más adelante la senda se divide (4). A la derecha hay una opción para coger un camino más ancho y más largo hacia el Mulhacén, pero nosotros seguimos recto por la senda más empinada y corta. Esta senda nos lleva a la primera cumbre con un palo de altitud, el Mulhacén II (5) en unos 3.362 metros.
- El último tramo del Mulhacén II hacia el Mulhacén (6) es bastante menos empinado, pero aquí el aire enrarecido nos juega malas pasadas.
- En la vuelta volvemos desde el Mulhacén hacia el Mulhacén II. Aquí tenemos que procurar pasar por el Mulhacén II y no desviarnos antes; la senda se encuentra detrás del Mulhacén II.
- Para volver al Alto del Chorrillo cogemos ya como variante la senda a la derecha, que se desarrolla como una bajada fuerte, el último tramo no por una senda clara sino por las rocas. Nos dirigimos hacia la pista, que podemos observar claramente abajo enfrente. Una vez llegado a esta pista (7), giramos a la izquierda hacia el Alto del Chorrillo (3), desde el cual seguimos la misma pista que en la ida.
- Unos kilómetros después del Alto del Chorrillo podemos hacer un atajo (8). Lo hacemos justo detrás de un puente desde le cual vemos enfrente la pista en una curva amplia hacia la derecha. A la izquierda hay un campo abierto en el cual entramos y que cruzamos oblicuamente. Como orientación cogemos una fila de pinos que vemos lejos de nosotros enfrente a la izquierda.
- Más adelante (9) tenemos que procurar no andar demasiado hacia la izquierda sino mantenernos hacia la derecha, para no ir demasiado hacia el este, aún cogiendo los pinos como orientación. Una vez en la esquina junto a estos pinos (10), giramos a la izquierda hacia abajo por un camino ancho y suelto, a lo largo de los árboles. Justo antes de que termine este camino nos mantenemos hacia la derecha, por una senda estrecha entre los árboles, que nos lleva a una curva de la pista (2), de la cual antes habíamos salido. Aquí giramos a la izquierda y seguimos la pista hacia la Hoya del Portillo (1).